Una semana después de que se diera el pistoletazo de salida al programa de verano de SoloSurf, la normalidad se ha impuesto casi de manera natural con el paso de los días. Ello es consecuencia, qué duda cabe, de la organización previa que desde la dirección de la asociación se lleva a cabo antes del inicio de cada campaña y, como señala el dicho, lo que funciona, para qué tocarlo.
Así, por ejemplo, se han puesto en práctica los diferentes criterios de trabajo en función de organizar los recursos disponibles con el manual de buenas prácticas por delante, con horarios nuevos que facilitan la conciliación del trabajo de los profesionales de SoloSurf, tanto técnicos como voluntarios, con la adopción además de medidas contra una sobreexposición al sol y a las altas temperaturas.
Así, se mantiene la programación matinal con dos turnos, una central en piscina para el nivel 1 que precisa de un trabajo específico y un trabajo de playa final, fuera de los horarios centrales del día para dar respuesta al total de clientes que participan en el programa de verano.
Este año también, como novedad y para facilitar el acceso a los programas e incidir un poco más en la calidad de la personalización del trabajo, se extiende el programa al viernes para usuarios del nivel 1, niños que han estado en los programas de piscina durante el curso y que ya han pasado las pruebas de playa con funcionalidad.
Como señala el director técnico de la asociación, Jesús Borrego, los programas siguen dando respuesta a la cartera de clientes de la asociación, en torno a unas cien familias, "y ya hemos empezado también a dar respuesta a las familias de turismo activo interno que eligen Cádiz para sus vacaciones, confiando en la calidad de nuestras actividades y teniendo un verano funcional cubriendo ese tipo de necesidades, conciliándose el uso y disfrute de las vacaciones en Cádiz con actividades que van a favorecer el desarrollo funcional de sus hijos". A corto o medio plazo, añade, "también tenemos el reto de dar respuesta a la lista de espera de personas interesadas en participar en nuestros programas, la mayoría de ellas niños con autismo, volviéndose a evidenciar cuál es el objetivo principal de este tipo de actividades".
Finalmente, recuerda Borrego que para el desarrollo de los programas de verano, SoloSurf sigue contando con la Residencia Militar de Cortadura, que pone a disposición de la asociación las instalaciones en clave de solventar diferentes aspectos logísticos y posibilita el desarrollo de un trabajo con mayor eficacia, así como el uso de los espacios públicos con el apoyo institucional pertinente y en coordinación con los servicios municipales que gestionan estos espacios e incluso la facilitación de fichas informativas sobre los usuarios a los servicios sanitarios de cara a precisar la intervención más adecuada llegado el caso de una urgencia.
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