2025, un año de retos: ofrecer un surf terapéutico profesional

Así ha sido 2025 para la Asociación SoloSurf, un año de retos: adaptarnos a los diferentes escenarios que se plantearon, como cambio de zonas de trabajo, incertidumbre en la respuesta del número de alumnos y alumnas que eligen SoloSurf para realizar prácticas, el cambio climático y sus fenómenos meteorológicos cada vez más intensos y variantes... Adaptarnos a las subidas salariales y la inflación interna...

En definitiva, adaptarnos a la exigencia de gestionar SoloSurf y, especialmente, nuestra participación en el importante proyecto europeo SurFedAUT; un esfuerzo que es compartido por importantes agentes sociales que forman parte de SoloSurf y del surf terapéutico, como son el Ayuntamiento de Cádiz, la Universidad de Cádiz, el Instituto Municipal del Deporte de Cádiz, la Delegación Municipal de Playas, Quironprevención o la Residencia Militar La Cortadura entre otros... Muchas gracias a todos por ayudarnos. 

Hablar de surf terapéutico profesional es hablar de un gran reto. Es hablar de volumen de negocio y esto es hablar de poder ofrecer actividades de surf terapéutico continuadas en el tiempo, con responsabilidad, y que, en nuestro caso, es un surf terapéutico, pionero y líder del sector en Europa, creando y manteniendo puestos de trabajo, métodos de formación y posibilidad de investigación científica.

Surf terapéutico es ir a la piscina o la playa al surf, como cariñosamente se refiere parte de nuestra clientela. Pero no debemos dejarnos engañar, pues sólo nuestra clientela puede verlo así; nada más lejos de la realidad. Surf-terapia es un tipo de terapia complementaria  con mayúsculas, con evidencia científica y más de 11.000 proyectos en el mundo que la aplican. 

Sus resultados no sólo dependen de que el contexto, el medio acuático, guste a los usuarios y se lo pasen bien o que este contexto venga bien per se. El contexto está ahí y es tremendamente retador. El objetivo es hacer que esa motivación y los resultados sean posibles.

El objetivo es hacerlo además en grupo y compartiendo un mismo interés, algo complicado  para personas que, por edad y perfil de  funcionamiento, discapacidad y salud asociados al diagnóstico de autismo, puede llegar a ser un gran reto para ciertos sectores profesionales vinculados con el ocio , el deporte y las actividades acuáticas.

Profesionales del sector clínico que tratan síntomas y profesionales del sector de la educación que procuran su desarrollo curricular saben bien la cualificación y rigurosidad que se requieren, y determinados aspectos de adaptación al rendimiento y el control del estrés de los participantes en estas actividades propuestas son muy necesarias especialmente en la infancia en niños con autismo. Como expertos en el surf terapéutico no todo es igual ni todo vale si no se consideran estás importantes necesidades.

Continuidad de las terapias de surf y volumen de negocio

Volumen de negocio no es  invertir capital  para generar beneficios económicos, sino invertir tiempo, energía, talento y creatividad, implementados mediante estrategias de gestión empresarial que permitan  invertir presupuestos con mucho esfuerzo y recursos difíciles de disponer para generar beneficios; los beneficios que el surf terapéutico, por evidencia científica, aportan a las personas con autismo y otras discapacidades. 

Esto es un reto. Lograr continuidad sin márgenes de error en noventa sesiones mensuales (cinco diarias), todos los meses del año, en las que grupos de personas muy organizadas ofrecen surf terapéutico profesional, para que otras personas con discapacidad lo reciban mediante acompañamiento cualificado.

Para cada sesión se requiere que estén todos los recursos disponibles de manera exhaustiva, que todo opere conforme a manuales técnicos que deben ser aplicados sin margen de error y siguiendo una operatividad en la organización, roles y protocolos en el trabajo que se deben seguir, ya que es lo que asegura la prevención del estrés en los equipos y ofrece bajos niveles de estrés a los participantes con discapacidad.

SoloSurf visible 

Para ello, existe un SoloSurf visible formado por un equipo de profesionales cualificados (psicóloga, coordinadora técnica, técnicos especialistas de grupo y técnico adjunto) que, como especialistas específicamente formados para realizar su trabajo, lo apliquen, asignados en las diferentes sesiones de surf terapéutico que ofrecemos.

Esto permite que niños, jóvenes y adultos con diferentes grados de autismo funcionen con normalidad en entornos con alta intensidad natural de estímulos sensoriales presentes y un alto impacto de energía social como son las piscinas públicas y las playas urbanas en horas de máxima afluencia.

Aplicar los manuales de la metodología SoloSurf permite acompañar terapéuticamente enseñar y aprender allí donde la vida puede ser más retadora para ambos, si quieren establecer vínculos seguros que permitan construir relaciones sólidas y seguras.

Además, para que estas noventa sesiones se lleven a cabo con todos los criterios de funcionalidad, seguridad y motivación, deben participar en ellas los  equipos no profesionales (ochenta personas de diferentes países y formaciones), que deben acudir en el número específico que cada tipo de sesión requiere, para atender a las  ratios de apoyo que requieren, especialmente los más de ochenta niños y niñas a los que atendemos.

Formar a todas las personas, asegurar el desarrollo de cada sesión, evaluar diariamente sus resultados y, en definitiva, verificar y asegurar el proceso de surf terapéutico que ofrecemos garantizando su sostenibilidad económica requiere un equipo complementario.

SoloSurf menos visible 

Un SoloSurf menos visible está formado por 5 personas que aseguran que pueda ser así. Cada día se ajusta el número de monitores no profesionales, se contrastan informes de evaluación y previsión de trabajo, se activan protocolos de actuación en incidencias y se registran informes de evaluación del desarrollo de cada una de las noventa sesiones, para asegurar las siguientes. 

Se trata de una estrategia compleja que se apoya en departamentos que aseguran el óptimo proceso de aplicación de surf terapéutico, la formación de los equipos profesionales, la formación de los equipos no profesionales, la inversión en recursos y la facturación del servicio en sostenibilidad, coherencia y ética.

 Europa habla 

Y esto es lo que a Europa le interesa, y concretamente a la Comisión para el Desarrollo Sostenible, Innovación e Investigación de Actividades de Surf-Terapia para personas con TEA, además de saber que el surf terapéutico es una terapia completa y complementaria con evidencia científica y que existen múltiples metodologías técnicas (psicología, pedagogía, terapia acuática, terapia deportiva, terapia ocupacional), estas no permiten auténticos procesos terapéuticos al no ser aplicados con continuidad a grupos numerosos y mediante capacidad profesional, o lo que es lo mismo, con formación en prevención de riesgos laborales.

Europa habla de volumen de negocio como estrategia de gestión de tipo empresarial, identificando a promotores cualificados mediante prevención de riesgos laborales especialmente establecidos para ofrecer un producto de surf terapéutico técnico y laboral de total calidad para personas con autismo y otras discapacidades que, como consumidores, merecen ser atendidos con los mismos derechos que el resto a la hora de elegir ofertas de deporte y ocio.

El surf terapéutico, bien aplicado y entendido, aporta salud y posibilidades de desarrollo integral y crecimiento personal. No todo vale en surf-terapia.

Un asunto de derechos 

La inclusión como energía positiva impulsada por diferentes colectivos que procuran asegurar los derechos a una vida plena y en comunión con el resto, debe incluir al inclusor como parte del proceso.

La Organización Mundial de la Salud mediante la CIF 2000 expresa claramente la corresponsabilidad en favorecer entornos capacitados y capacitantes que consideren las particularidades de cada ser humano y muy especialmente a personas con discapacidad.

Ofrecer por tanto actividades de surf terapéutico a las personas con autismo y otras discapacidades no sólo requiere de la idea de lo necesario que puede ser, sino que requiere cualificación, no sólo técnica, sino laboral mediante una formación específica en prevención de riesgos laborales psicosociales, asegurando derechos y salud de equipos técnicos y consumidores desde la responsabilidad del promotor.

SurfedAut Projet consistió precisamente en esto, en crear el primer marco europeo de seguridad laboral para el desarrollo de actividades de surf terapéutico para personas con autismo, un hito que se presentó en la convención internacional de la ONU en El Cairo (octubre de 2024) y se prevé dentro de la agenda de desarrollo sostenible de la ONU 2030.

SoloSurf, como autor intelectual de este importante manual y parte del equipo SurfedAut, trabaja para asistir a los derechos de las personas con autismo y otras discapacidades, desde lo que sabemos hacer: ser creadores del surf terapéutico como actividad terapéutica, como metodología y como profesión.

Objetivo 2026

Para el nuevo año, seguiremos trabajando para adecuarnos siempre a todos los retos que suponen mantener nuestra actividad, conscientes de nuestras limitaciones y de nuestros potenciales, para atender a la demanda de más de cien familias, procurando que todos los recursos, espacios y personas estén disponibles según nuestros usuarios con autismo y otras discapacidades esperan, piensan y sienten para que puedan tomar decisiones que les sean útiles y les benefician en sus vidas.

Jesús Borrego

Cofundador y director técnico de Asociación SoloSurf